Luego de llegar a saquear cuanto se encontraron en el camino, Elías Jaua y su banda de ladrones revolucionarios decretaron que la finca La Carolina, hasta hoy propiedad de Diego Arria, serviría de Centro Técnico Productivo.
¿Qué significa exactamente eso? Nadie sabe, pero de cualquier forma es una excusa oficial para justificar el robo de una propiedad privada que se encontraba al 100% de su productividad.
Por ello, no aplicaba el tema de "tierras ociosas". Así que simplemente la declararon como una "propiedad sin dueño"...y se la quedaron.
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