miércoles, 30 de junio de 2010

MIIIIIIIIII...QUILENA


Cuando Miquilena aún acompañaba de cerca al dictador, ya todos sabíamos la proximidad inevitable de una dictadura.
Entonces ahora no me venga a hablar en nombre de los opositores al régimen, criticándolo de ineficiente y comunista.

HUELE A PODRIDO EN VENEZUELA


Ya desde hace unos once años, la sed de poder de quienes hasta entonces jamás habían podido, hizo que la corrupción tomara formas de venganza, y como quien dice "ahora me toca a mí" se inició sin control y sin freno al punto de alcanzar niveles difíciles de medir.

Los ingresos petroleros jugaron a favor de este inmenso error histórico llamado revolución, y permitieron que el desorden y el oportunismo exagerado pasara casi desapercibido.

En general, la estructura política del partido de gobierno (PSUV) y el esquema operativo del caudillo, han sido factores permisivos para que la podredumbre llegue a estratos inimaginables: se le da plata a la gente sin trabajar, se le da armas a los pisos más bajos de nuestra sociedad, se siguen repartiendo cargos y expropiaciones a amistades o jalabolas allegados al desgobierno, se sustituye gente capaz por incapaces a todas luces simplemente por simpatías revolucionarias...En fin, la descomposición moral, social y política ha caído a niveles tan bajos y degradantes, que pareciera normal que ahora se descubran, en el mix perfecto de ineficiencia con malos "manejos", las miles de toneladas de alimentos podridos bajo la única responsabilidad de PDVAL, es decir, del régimen.

Siempre aparecerá un "chino de Recadi" en todas las historias, para que el dictador pueda exhibir su capacidad de castigo hasta con sus propios seguidores, pero también siempre prevalecerá la sensación de la gente de que el hambre que está pasando podría bautizarse hoy mismo: Hugo Rafael Chávez Frías.